I. PERDIDO
Teodoro Golfín llega a
Sócrates a vivir con su hermano Carlos, el ingeniero de las minas, y en el
camino se encuentra con Pablo Penáguilas, un joven ciego que conoce muy bien
los caminos. Pablo le ofrece ayuda para llegar a su destino. El pueblo minero se
encuentra en el norte de España.
II. GUIADO
Teodoro muestra interés
por la ceguera del muchacho, pero no por curiosidad sino por su profesión de
médico especialista en los ojos. Pablo lo acompaña la mitad del camino y de ahí
en adelante le ofrece la guía de Marianela, una joven huérfana sin cobijo y
lazarillo del muchacho.
III. UN DIÁLOGO QUE
SERVIRÁ DE EXPOSICIÓN
Marianela expone a
Teodoro la historia de su vida, de sus penurias y dice no servir para nada ni
para el trabajo de las minas. El médico le asegura que esas ideas que le han
hecho creer sobre ella misma son falsas. Llegan a casa de su hermano Carlos y
su esposa Sofía.
IV. LA FAMILIA DE
PIEDRA
Después de haber rodado
por muchos lugares, Nela vive en la casa de los Centeno, quienes le ofrecen un
par de cestos donde dormir y, de vez en cuando, un pedazo de pan. Todos son
trabajadores de las minas y la mayor obsesión de los señores Centeno es contar
todas las noches sus monedas.
V.
TRABAJO-PAISAJE-FIGURA
El autor nos narra los
paisajes y un día de trabajo en las minas. Todos los habitantes abandonan sus
casas muy temprano para ir a trabajar y también la Nela, que va en busca de su
amigo Pablo, el hombre ciego, para salir a pasear. Don Francisco, el padre del
joven, los despide en el umbral de la casa y les pide no alejarse demasiado
pues amenaza con llover.
VI. TONTERÍAS
Pablo y Marianela se
van a pasear por el campo. El joven le profesa un inmenso amor a Nela, pues ha
conocido el mundo a través de sus ojos; además, Marianela, a pesar de su
miseria, posee un gran corazón.
VII. MÁS TONTERÍAS
Carlos, su mujer y
Teodoro están invitados a cenar en Aldearcorba, la casa de don Francisco. El
médico está interesado en el caso clínico de Pablo y lo somete a algunos
estudios.
VIII. PROSIGUEN LAS
TONTERÍAS
Pablo y Marianela salen
a pasear como de costumbre y éste le cuenta a Nela sobre la esperanza que le
dio Teodoro de recuperar la vista. Marianela se alegra por su amo, pero teme
perderlo.
IX. LOS GOLFÍNES
Los Golfínes se dirigen
a casa de don Francisco y en el camino se encuentran con la Nela. La mascota de
la familia sufre un accidente y Nela lo rescata, ella sangra de una pierna y
Teodoro la cura y la lleva en hombros.
X. HISTORIA DE DOS
HIJOS DEL PUEBLO
Sofía, la mujer de
Carlos Golfín, dedica su tiempo a la caridad, actitud de la que Teodoro
desconfía. En el afán de dar una lección a su cuñada, Teodoro le narra la
historia de penas y triunfos por las que pasaron él y su hermano.
XI. EL PATRIARCA DE
ALDEACORBA
Don Francisco platica
con los Golfines y externa su entusiasmo y preocupación por la próxima
operación a la que se verá sometido su hijo. Teodoro dice que no puede asegurar
el éxito, pero les promete que hará su mejor esfuerzo.
XII. EL DOCTOR CELIPÍN
Celipín es el hijo
menor de los Centeno, la familia con la que la Nela vive, y el pequeño es el
único con intenciones de cambiar su destino. Todas las noches le cuenta a la
Nela de sus planes de ser médico.
XIII. ENTRE DOS CESTAS
Marianela pasa noches
en vela pensando en la posibilidad de que su amo reciba el don de la vista y
deje de quererla.
XIV. DE CÓMO LA VIRGEN
MARÍA SE APARECIÓ A LA NELA
Un día, cuando la Nela
caminaba cerca de las minas se le apareció la Virgen. La Nela vio una joven tan
bella y tan perfecta que la confundió con la Virgen Santísima. Después de largo
rato de observarla se percató que era Florentina, la prima de su amo Pablo,
quien estaba encantada con la naturaleza del lugar.
XV. LOS TRES
La Nela va, como todos
los días, por Pablo para salir a pasear. Ahora, son tres los caminantes, la
Nela, Pablo y Florentina. Marianela está perturbada por la belleza y la bondad
de la prima, cosa que Pablo dice poner en duda.
XVI. LA PROMESA
La operación se lleva a
cabo y el padre de Florentina le ofrece a su hermano que sus hijos unan sus
vidas en matrimonio. Todo el pueblo está a la expectativa y al paso de unos
días la noticia de que el joven Pablo puede ver es ya pública.
XVII. FUGITIVA Y
MEDITABUNDA
La Nela tiene miedo a
ser rechazada por su amo y amigo y pasa los días vagando por el campo.
Florentina la encuentra y le dice que Pablo espera por ella, además, le ofrece
llevarla a vivir con ellos y le ofrece cambiar su vida de pobreza, pero la Nela
se niega y escapa.
XVIII. LA NELA SE
DECIDE A PARTIR
Celipín ha reunido el
dinero suficiente para emprender su camino e invita a la Nela a irse con él.
Marianela acepta, pero al poco tiempo de andar se arrepiente y se despide de
Celipe.
XIX. DOMESTICACIÓN
Teodoro encuentra a la
desdichada joven y la obliga a que le cuente sus penas. Después de largo rato
de hablar, Teodoro obliga a Mariquilla a ir a Aldeacorba.
XX. EL NUEVO MUNDO
Lo primero que apareció
ante los ojos de Pablo fue su prima Florentina. El chico se quedó prendado de
su belleza y no dejó de comparar entre lo feo y lo bello de todas las cosas y
personas que fue conociendo. Siempre preguntaba por la Nela pero ésta no
aparecía. Pablo estaba fascinado con su prima y se olvidó de todo. Los dos
estaban de acuerdo y felices en unirse en matrimonio.
XXI. LOS OJOS QUE MATAN
Teodoro había llevado a
Marianela a la habitación de Florentina y ahí era donde reposaba. Había dormido
toda la noche, pero Nela estaba muy débil. Estando los tres en la habitación,
irrumpió, sorpresivamente Pablo sin percatarse de la presencia de las visitas.
Empezó a hablarle a Florentina de su belleza y de los deseos de casarse con
ella. Le habló de su arrepentimiento de haber estado enamorado de la Nela.
Cuando descubrió al médico y más tarde a la chiquilla tirada en el sillón,
Marianela develó su identidad y, después de besar la mano de su antiguo amo,
exhaló su último suspiro. Teodoro aseguró ser el culpable de tal desgracia por
haber dado la vista a Pablo.
XXII. ¡ADIÓS!
Florentina le ofreció a
Nela un hermoso sepulcro, riqueza que no pudo brindarle en vida.